Características
La Cortadera (Cortaderia selloana) pertenece a las gramíneas nativas, es una hierba relativamente grande que puede alcanzar los 3 metros de altura cuando florece. Tiene hojas arqueadas, de hasta 1 metro de largo y 1 cm. de ancho, con márgenes cortantes hacia un lado. Sus flores se encuentran reunidas en largas panículas plateadas o lilas, de 30 a 60 cm. de largo, densas y sedosas (plumerillo). Florece durante el verano. Las panículas se utilizan en forma ornamental.
Foto: Hugo Gribman
Esta especie es originaria de la región del Plata, desde el sur de Brasil hasta el norte de la Patagonia. Crece en bañados, suelos arenosos, terrenos húmedos y anegadizos. Es una planta ornamental en muchos lugares del mundo, fue introducida en parques y jardines de EE.UU, Europa y Nueva Zelanda, donde se la cultiva con ese fin, allí se la conoce con el nombre de “Pampas grass”.
En su ambiente
Se agrupa en numerosos ejemplares formando “el cortaderal”. Como toda planta autóctona, tiene un papel fundamental en el ecosistema. Muchas aves frecuentan el cortaderal alimentándose de sus semillas, anidando o simplemente buscando refugio, como por ejemplo los Mistos (Sicalis luteola), el Verdón (Embernagra platensis), Pecho amarillo (Pseudoleistes virescens), Pico de plata (Hymenops perspicillatus) y el Gavilán planeador ( Circus buffoni) entre otros.
Foto: Fabiana Sicco
Una visitante particular, es la hermosa Heliconisa (Heliconisa pagenstecheri), una mariposa que cumple todo su ciclo de vida en la Cortadera. Las orugas negras, inofensivas, se alimentan exclusivamente de las hojas de esta planta. Cuando se transforman en mariposa (polilla), las hembras más oscuras se quedan sobre las plantas. Vale la pena ver a los machos volar con sus alas transparentes, ya que van perdiendo sus escamas, buscando a las hembras.
Brindémosle la importancia que ésta planta merece desde el punto de vista ecosistémico, preservando el cortaderal, cultivándola en nuestro jardín o dejando algunos ejemplares en forma silvestre en áreas urbanas. Antiguamente, la cortadera dominaba el pastizal, formando el “mar de pastos” al que hacía referencia G.E.Hudson, allá por el 1800…